Un caballo de ruta debe estar preparado para recorrer grandes distancias por un terreno variado, y en diferentes condiciones climáticas, por lo que si no tiene previamente un entrenamiento adecuado, difícilmente llegará a ser un buen caballo de ruta.
Antes de programar un entrenamiento, se necesita plantearse unos objetivos concretos, de tal forma que el entrenamiento mas adecuado será aquel que cumpla mas certeramente los objetivos planteados.
El caballo de turismo ecuestre como ya hemos dicho anteriormente en otros capítulos debe ser un caballo resistente, por lo que tendrá que cumplir los objetivos que se le piden a un caballo entrenado para resistencia, aunque a un determinado nivel. También e requerirá que tenga fuerza, ya que al peso del jinete, muchas veces hay que añadirle el peso del equipaje del jinete mas unos 2-3 kilos de pienso para el caballo, que será muy útil en determinadas circustancias. Para empezar, tenemos que poner énfasis en un principio muy importante: El entrenamiento se hará de forma progresiva hasta que se consiga el estado de forma óptimo, esto que a primera vista parece ago obvio, se olvida con gran frecuencia porque se piensa mas en el caballo como medio de trasporte, y se olvida al ser vivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario